domingo, 20 de noviembre de 2016

Sintonía de La víspera del infinito (rne)



Gracias a la pista que me proporcionó Petonen, tras revisar los primeros trabajos de la banda, finalmente he podido localizar el origen de la sintonía del programa de rne "La víspera del infinito".
En concreto, se trata del comienzo del tema "Atom Heart Mother" del LP del mísmo título editado en 1970 por Pink Floyd. Sé que muchos seguidores del programa compartían nuestra curiosidad, por tanto: misterio solucionado...


miércoles, 16 de noviembre de 2016

Lauren Mendinueta





Así pasan los años

Pasan los años,
y aunque la vida me acusa de inmovilidad,
también yo he viajado.
Como una partícula de polvo
he revoloteado por la casa y me he prendido a los libros.
Como un insecto he reposado a la orilla de las acequias,
o simplemente he sido una mujer que de tarde en tarde
he mirado hacia el mar
buscando barcos olvidados por la neblina
y que vuelven a la memoria,
sin esperanza distinta de la muerte.


El dominio

Me asomo a la tarde, miro las nubes de soslayo,
desplazándose vistas y exaltadas sobre el pico de la montaña.
Se deslizan hacia el olvido de la mirada,
hacia el coro urdido por el silencio, o más allá.
En esta cárcel, mi condena,
la muerte está sentada al otro lado de la salida.
No me abandonará por ahora,
ella seguirá presa en mí, mientras afuera llueve
y el recordado azul del cielo, se vuelve agua en los cristales.


(Lauren Mendinueta,  La Vocación Suspendida, Point de Lunettes, España, 2008) 

viernes, 11 de noviembre de 2016

Afortunada


Actúa de la manera en la que te gustaría ser y pronto serás de la manera en la que actúas.

Aunque estoy convencido de que nada cambia, para mí es importante actuar como si no lo supiera.

(Leonard Cohen)







Se detuvo unos instantes en el collado, cerró los ojos y se concentró en paladear el viento del norte que,  gélido y directo como el golpe de una daga, azotaba la escasa vegetación. Se preguntó a cuántos amaneceres como aquél podría asistir. Con suerte, a un puñado de inviernos más, que en  el mejor de los casos representaban una cifra modesta. El de hoy, ya es mío, el próximo es una mera hipótesis de trabajo, pensó.

A través de los párpados apretados notó el fogonazo aloque del orto. Un escalofrío le hizo tomar conciencia de que estaba aterida. Dio media vuelta y complacida por su buena fortuna inició el descenso hacia el valle que, hospitalario, se ofrecía a envolverla en la calidez de la vida...



¿Cómo evitar el simulacro,
cómo vivir sin desvivirnos?
Surcan los días por tu vientre.
Somos el tiempo que nos queda.

José Manuel Caballero Bonald