miércoles, 29 de octubre de 2014

Movimiento y vida

"Nuestra naturaleza reside en el movimiento; la calma completa es la muerte".


Pascal "Pensamientos"





“Sobre todo, no pierdas tu deseo de caminar: yo mismo camino diariamente hasta alcanzar un estado de bienestar y al hacerlo me alejo de toda enfermedad. Caminando he tomado contacto con mis mejores ideas, y no conozco ningún pensamiento cuya naturaleza sea tan abrumadora como para que uno no pueda distanciarse de él andando… Pero cuando te quedas quieto, y cuanto más te quedas quieto, más próximo estás a sentirte enfermo… De modo que si caminas sin parar, todo te saldrá bien”.

Soren Kierkegaard




"Nuestras maltratadas maletas se amontonaban sobre la acera de nuevo; nos quedaban largos caminos por recorrer. Pero no importa, el camino es vida".

 Jack Kerouac



"La nostalgia del hogar es un sentimiento del que muchos saben y se quejan; yo, por el contrario, sufro de un dolor menos conocido, y su nombre es nostalgia del afuera. Cuando la nieve se derrite, las cigüeñas llegan y los primeros barcos de vapor zarpan, me asalta la punzante comezón de partir".

 Hans Christian Andersen



“Deja tu casa. Ve solo. Viaja ligero. Lleva un mapa. Ve por tierra. Cruza a pie la frontera. Escribe un diario. Lee una novela sin relación con el lugar en el que estés. Evita usar el móvil. Haz algún amigo".

 Paul Theroux



 “¿Por qué la vida humana no acabará como los otoños de África, con un cielo claro y vientos tibios, sin decrepitud ni presentimientos?”.


  Eugène Fromentin







"Para esta dolencia (la melancolía) no hay nada mejor que cambiar de aire, que vagabundear en una y otra dirección, como aquellos zalmohenses tártaros que viven en hordas y que aprovechan la oportunidad de disfrutar de tiempos, lugares, estaciones."

 Robert Burton










miércoles, 22 de octubre de 2014

Alienación






Existencias sin derrotero, inanes,
surcando un inmenso espacio, árido y desierto.

Miradas hipnóticas que se reflejan
en el pálido resplandor de los móviles.

Ninguna señal que los guíe
emiten las pantallas.

Vanas respuestas,
ante la ausencia de preguntas.

Alienación y vacuidad.

Mutan los tiempos, 
permanecen las incertidumbres…





jueves, 16 de octubre de 2014

Así empieza lo malo...




Es probable [...] que mirara a su alrededor un rato para acostumbrarse al lugar frondoso que sería el último oscurecido [...].

Dentro de nada dejaré de pertenecer a los necios e incompletos vivos y seré como nieve que cae y no cuaja, como lagartija que trepa por una soleada tapia en verano y se detiene un instante ante el perezoso ojo que no va a registrarla. Seré lo que fue, y que al no ser más, ya no ha sido. Seré un susurro inaudible, una fiebre pasajera y leve, un rasguño al que no se hace caso y que se cerrará en seguida. Es decir, seré tiempo, lo que jamás se ha visto, ni puede nunca ver nadie.

[...]

Tal vez su pensamiento último, a la carrera, fue más breve y más sencillo y se pareció mucho a este: "Así empieza lo malo y lo peor queda atrás".


Javier Marías "Así empieza lo malo" (2014)



Los fragmentos anteriores constituyen las reflexiones de una mujer instantes antes de consumar su suicidio así como las hipótesis que elabora el narrador acerca de cuáles pudieran ser los últimos pensamientos que atravesaran su mente en tan crucial y definitiva situación.

Al margen del contexto de la novela a la que pertenecen, el párrafo central que se reproduce me ha cautivado de manera especial durante la lectura de la obra de Javier Marías por constituir, a mi juicio,  una bella imagen de una vida, de cualquier vida, en este caso a punto de finalizar. 

Estas líneas me han llevado a evocar el concepto de sobriedad, implícito en el texto y que contrasta con nuestra realidad cotidiana, poblada por demasiados individuos fatuos, endiosados y engreídos que, a pesar de su irrelevancia, siembran el infortunio en las vidas de tantas personas sobre las que ejercen su maligno influjo, arrogándose unos atributos de los que carecen.

El cuadro reproducido más arriba  simboliza para mí lo expresado en el texto de Javier Marías: el hombre efímero,  frente las montañas y los hielos que lo trascienden...



domingo, 12 de octubre de 2014

2039

Contempló el enorme rostro. Le había costado cuarenta años saber qué clase de sonrisa era aquella oculta bajo el bigote negro. ¡ Qué cruel e inútil incomprensión !  ¡ Qué tozudez la suya exilándose a sí mismo de aquel corazón amante ! Dos lágrimas, perfumadas de ginebra,  le resbalaron por las mejillas.  Pero ya todo estaba arreglado, todo alcanzaba la perfección, la lucha había terminado. Se había vencido a sí mismo definitivamente. Amaba al Gran Hermano.

George Orwell "1984" (1948)



La televisión funciona siempre
nos proyecta un mundo irreal
nos hace olvidar la verdad de las calles
bendita televisión
santa televisión
querida televisión...

[...]

La tele no descansa
la tele te vigila
la tele es nuestra amiga [...]

Topo "Vallecas 1996" (1978)





El led comenzó a parpadear con apresurada cadencia y un monocorde zumbido se extendió por la habitación. Gina se dirigió al buzón, presionó el pulsador y observó la trampilla que se elevaba lentamente. Tomó con ambas manos el paquete depositado en el que destacaba, brillante, la estampación con el sello del Ministerio de Homogeneización Social que ocupaba la zona destinada al remitente.

Presa de la impaciencia, abrió el envoltorio y extrajo el contenido. De inmediato su proyector holográfico, situado en el centro de la sala, se activó. Dirigió la mirada hacia él. Una joven con el familiar uniforme azul, se materializó en la confluencia de los haces láser:

- ¡Hola, Gina! En nombre del Gobierno te doy la bienvenida al Programa de Inserción Social para mayores de 35 años.  Una vez  finalizado tu periodo de servicio profesional obligatorio, se inicia una nueva etapa en tu vida, en cuyos primeros pasos te voy a acompañar.

- El protocolo es muy sencillo: mensualmente recibirás un envase con 60 comprimidos de ataraxim, "el bienestar vestido de color rosa".  Deberás tomar uno por la mañana y otro por la noche. Es muy importante que mantengas la pauta prescrita. Asimismo se te suministrará un complejo minero-vitamínico y los alimentos liofilizados que precises.






- Ahora, ajústate tu nuevo visor de realidad virtual. 



Gina obedeció y se sujetó con la correa elástica el artilugio, similar a una máscara de buceo que tuviera la lente ahumada.

- Su funcionamiento es muy intuitivo. Únicamente tienes que concentrarte unos instantes y pensar qué actividad quieres desarrollar. De este modo se activará  de manera automática. Vamos a realizar una prueba. Antes has de saber que algunas personas experimentan durante los primeros ensayos ciertas dificultades para mantenerse en un marco y saltan sin control de una situación a otra, así como algunos efectos secundarios transitorios causados por la exposición a la hiperrealidad, por lo que te sugiero que al principio, hasta que te acostumbres y adquieras práctica, las sesiones sean breves y espaciadas.

- ¿Preparada?

Gina imaginó el parque de su barrio. De inmediato se encontró inmersa en uno de los paseos centrales. Los árboles formaban una bóveda que tamizaba la luz del sol. Percibió el olor jugoso de la vegetación húmeda y la temperatura agradable. Comenzó a caminar notando la tierra húmeda bajo sus suelas. Le llegaban los ecos lejanos de las voces de los niños que jugaban en la zona infantil ...

Entusiasmada por el realismo de las percepciones, evocó el día en que asistió al concierto de Slaves.

Repentinamente, sin  transición, se encontró frente a un inmenso escenario bañado por proyectores multicolor. El humo brotaba de los cañones, comenzaban a sonar los primeros acordes de la música. Tras una cegadora explosión de luz, los componentes del grupo aparecieron tras la niebla, y el sonido, potente y nítido, se adueñó del estadio. La multitud enfervorecida, alzaba las manos... 

- ¡ Basta ! Gritó la emisaria gubernamental.

Gina se sobresaltó. Súbito silencio. Oscuridad.

- Retírate el visor. Únicamente era una prueba.

Gina obedeció.

- ¿Qué tal?

- Impresionante.

- Magnífico. Ahora, tienes un mundo de posibilidades en tus manos. No te preocupes por nada. El "Escrutador Central" supervisa tus acciones y te advertirá si ejecutas acciones no permitidas. Por supuesto, tu intimidad está a salvo; el "escruta" es un sistema informático inteligente, respetuoso con tus derechos constitucionales. 

- Solo me resta desearte, en nombre del Gobierno, que este periodo que hoy inicias te resulte venturoso. ¡ Hasta la vista, Gina!

La imagen se desvaneció con un precioso efecto visual, deshaciéndose en una miríada de puntitos brillantes.

Gina, se sirvió un vaso de agua e ingirió el primero de los comprimidos, seguidamente se sentó en su sillón de masaje,  cerró los ojos y pensó en lo afortunada que era, en el prometedor futuro que vislumbraba...

En el exterior todavía humeaban los rescoldos de las hogueras que, a modo de barricada, habían prendido en la Gran Vía los proscritos. Las unidades de seguridad, rasgando la noche con sus sirenas, patrullaban los alrededores a la caza de los inadaptados que osaban violar el toque de queda.

Gina tomo el teclado y conectó con sus amigos virtuales para charlar un rato, quizá para invitarles a compartir unas copas, tal vez a dar una vuelta tras sincronizar sus visores...


domingo, 5 de octubre de 2014

Colores





De pronto apareció sobre las largas nubes azules una estría roja, el horizonte se iluminó con resplandores de fuego, y por encima de las lejanas montañas el disco del sol miró a la tierra y la cubrió con la gloria y la magnificencia de los rayos de su inyectada pupila. Los montes tomaron colores: el sol brilló en la superficie terca y sin olas de la laguna.

(Pío Baroja, "Camino de perfección", 1902)


Colores

Has visto amanecer
el páramo en León,
la bruma gris
y un viejo caserón.

Has visto romper las olas
contra el dique de Gijón,
sentir la fuerza del mar 
a tu alrededor.

¿ Te has parado alguna vez a ver
los colores que estallan en Madrid,
cuando al salir del metro en una tarde otoñal
el sol se va ?

La mancha es de un color
que no puedo explicar,
mitad magia, mitad desolación.

Andalucía duerme, en sábanas de cal,
el triste sueño de la soleá.

¿Y del Mediterráneo qué?
¿A quién no le enciende su color?
Siempre habrá un sitio en tu puerto,
siempre el hijo predilecto del gran padre sol.

Son los colores que me hacen sentir bien,
[...]
son los colores que nos hacen sentir bien...


(Del disco de TOPO  "Marea negra", 1982)



Los colores de uno de nuestros inolvidables amaneceres. Son instantes que siempre buscamos con ahínco. Su evocación nos insufla aliento y fortaleza en los momentos grises y anodinos: demasiados días malgastados en cuestiones irrelevantes, en esta sociedad a la deriva.




(Agosto de 2010)