jueves, 29 de mayo de 2014

Los antisistema




Gran parte de los gobernantes, causantes de nuestro infortunio, tachan de antisistema a todos aquellos que no se muestran sumisos a sus prejuicios y manejos. Confunden los términos, y deliberadamente quieren confundirnos a todos.



El sistema está constituido por el conjunto de los ciudadanos y sus instituciones de diversa índole. Los "responsables" políticos han sido designados para gestionar dichas instituciones poniéndolas al servicio de un objetivo principal:  la mejora de las condiciones de vida, en sentido amplio, de los integrantes de la sociedad. Su acción ha de regirse por unos  principios básicos e irrenunciables: la justicia y la igualdad de todos.

Estos dirigentes nefastos, hacen gala de un exclusivismo ramplón. Sus fines y sus medios atentan contra aquello que debería inspirar sus acciones. Con perversidad maltratan y marginan a la mayoría de la ciudadanía que es la que  les otorga sus prerrogativas, adueñándose de modo ilegítimo de la Administración Pública para su provecho personal, el de los suyos, y el de los partidos a los cuales pertenecen.






Ellos, los malos gobernantes, con su connivencia hacia los que traicionan la confianza depositada en las "agencias sociales", son los verdaderos antisistema.






domingo, 25 de mayo de 2014

Cross en el Alto Tajo




Despeñaderos tallados con paciencia secular por insondables fuerzas telúricas,  proas vigilantes sobre la fronda glauca, icebergs varados. 











La estrecha, pedregosa y árida senda serpea ascendente,  proyecta su punto de fuga en los cantiles lejanos. El río, lámina esmeralda, y su manso deslizar... Las nubes a la deriva flotan inertes, sus sombras se amplifican sobre el fondo del valle, produciendo una danza de claroscuros virtuales, arcana coreografía.









El  páramo; algunas sabinas resistentes a los fríos y los vientos de tantos inviernos: sobriedad bella.




 Crepitar de  pisadas, soledad, mar abierto, orzar, ceñir, surcar, vivir... 





Ceñir: navegar a vela en contra del viento, formando el menor ángulo posible.
Orzar: inclinar la proa hacia la parte de donde viente el viento (RAE)

jueves, 22 de mayo de 2014

El río que nos lleva




(…) el alto Tajo no es una suave corriente entre colinas, sino un río bravo que se ha labrado a la fuerza un desfiladero en la roca viva de la alta meseta. Y todavía corroe infatigable la dura peña saltando en cascada de un escalón a otro, como los que han dado nombre a aquella hoz. Sí, el esfuerzo del río continúa: lo demuestra el aspecto caótico de obra a medio hacer, con los desplomes de tierra al pie de los acantilados, las enormes peñas rodadas desde lo alto hasta en medio del cauce, la rabia de las aguas y su espumajeo constante. El río bravo sigue adelante, prefiriendo la soledad entre sus tremendos murallones, aislado de la altiplanicie cultivada y de sus gentes, para que nadie venga a dominarle con puentes o presas, con utilidades o aprovechamientos. Los pueblos le huyen, asustados por las bajadas al barranco y temerosos de las riadas. Apenas los pastores y los trajinantes se le acercan por necesidad. Sólo los gancheros se atreven a convivir con él, y aun así parece encabritarse para sacudirse los palos de sus lomos y enfurecerse más aún contra los pastores del bosque flotante.


José Luis Sampedro (“El río que nos lleva”)
















lunes, 19 de mayo de 2014

Despedida (abril de 2014)





El invierno,   aprovechando la llegada de los  vientos  propicios, ha iniciado  de madrugada su travesía austral, rumbo a latitudes  que le sean más favorables. A modo de simbólica despedida, con un guiño cómplice,   como muestra de agradecimiento por su hospitalidad,  por tantas conversaciones compartidas en voz baja  durante  las largas noches, por su amistad ancestral, con un ¡hasta pronto! le ha brindado al Guadarrama un obsequio:  prendidas  en las ramas de los árboles unas fugaces flores de nieve, tan valiosas como precarias.







sábado, 17 de mayo de 2014

Esto no es nada







Si tuviésemos la fuerza suficiente
para apretar como es debido un trozo de madera,
sólo nos quedaría entre las manos
un poco de tierra.
Y si tuviésemos más fuerza todavía
para presionar con toda la dureza
esa tierra, sólo nos quedaría
entre las manos un poco de agua.
Y si fuese posible aún
oprimir el agua,
ya no nos quedaría entre las manos
nada.

(Ángel González)





jueves, 15 de mayo de 2014

Scenes from a dream


  
Finalizado ya el derrotero previsto para esta jornada, bajo un árbol, la vivificante brisa me rodea con su caricia inasible. En las montañas las estaciones se manifiestan con cierto desfase respecto a la ciudad próxima: el otoño y el invierno se instalan antes; la primavera y el verano se demoran y resultan más cortos. Es una sensación casi mágica, la ilusión de ubicuidad, experimentar la variación, en ocasiones radical, de las condiciones meteorológicas desplazándose unos pocos kilómetros, en unos cuantos minutos...


La temperatura reconforta, el hálito tenue trae en suspensión los aromas de las plantas, que respiran hondo tras el largo invierno, especialmente intenso el de la jara pringosa que al calor del sol expande su característica fragancia, o el del piorno serrano que, en esta altitud relativamente baja a la que me encuentro ya ha florecido en el valle. Progresivamente colonizará zonas más elevadas de la Sierra, tiñéndolas de amarillo, hasta ofrecernos durante unos pocos días el fascinante y efímero espectáculo que marca la llegada del verano a las cimas del Sistema Central.





Los pajarillos y sus efervescentes cantos, buitres en grupos buscando térmicas propicias, algún águila solitaria en vuelo errante, la gasa de las nubes, el rumor amortiguado del río, mayo y sus infinitas promesas de  juventud... 





A través de los auriculares Chris Minh Doky pulsa con parsimonia las cuerdas de su contrabajo eléctrico, emitiendo notas corpóreas, tridimensionales, mantras de meditación. Es el álbum "Scenes from a dream", colores de cine en sus pasajes orquestados. Mantengo la música a un volumen bajo, de tal modo que pueda oír los sonidos ambientales de la naturaleza,  que se mezclen con lo que escucho a través del mp3; semeja un maravilloso estudio de grabación en el que pudiera combinar las pistas de audio, vídeo, los olores y las sensaciones de toda índole, a mi gusto.

Scenes from a dream... 
  
Sí.  Escenas   de  un plácido y revitalizante sueño de felicidad... 

El género de felicidad intangible y evanescente al que podemos aspirar...










domingo, 11 de mayo de 2014

José Hierro "Vida"







Después de todo, todo ha sido nada,
a pesar de que un día lo fue todo.
Después de nada, o después de todo
supe que todo no era más que nada.

Grito "¡todo!" , y el eco dice "¡nada!"
Grito "¡nada!", y el eco dice "¡todo!"
Ahora sé que la nada lo era todo,
y todo era ceniza de la nada.

No queda nada de lo que fue nada.
(Era ilusión lo que creía todo
y que, en definitiva, era la nada).

Qué más da que la nada fuera nada
Si más nada será, después de todo,
después de tanto todo para nada.


(De "Cuaderno de Nueva York")


miércoles, 7 de mayo de 2014

Como la vida





Vertiginosas ráfagas,  imágenes que no es posible retener, el extrarradio urbano y sus autopistas colapsadas.

Impresiones...

La línea del horizonte.

Ampliar la mirada... 

Los campos jugosos de primavera y sus cielos azules. 

Recapitulación...

Fábricas abandonadas, detenidas hace décadas, espectrales vestigios del náufrago progreso.

Síntesis...

Precarias construcciones agrícolas, terrenos sembrados o baldíos.

Destilación...

Áridos caminos sin destino. 

La huella indeleble de la pisada leve...

Algún pueblo que surge en medio de nada.

Intuiciones...

Retazos de carreteras desiertas.

Inefable...

El mar, apenas entrevisto, los aerogeneradores y su giro prisionero, la luz, el túnel... La luz.














Del todo a la nada, frenético trepidar de timbales que golpea... Como el rayo desgarra, como la vida que pasa...